Javier reseña a Javier González Blandino (Nicaragua)

Javier González Blandino. Historia vertical. Managua: Leteo ediciones, 2011. 157 págs.

Los atributos también lloran 

En términos estrictamente genéricos Historia vertical—primogénito libro de Javier González Blandino (La Paz Centro, León, 1984)—es una colección de cuentos o relatos cortos. Pero yo diría que el debut de Blandino es otra cosa. Si tuviera que describírselo a un amigo le diría que es como un étagère o estantería; una estructura compuesta de tramos para poner y/o exhibir cualquier adorno, quizás un incensario en la parte superior, una candela color ámbar rodeada de libros (Vallejo, Blanchot, Martínez Rivas) y fotos marchitas u objetos varios en los anaqueles restantes. Historia vertical está compuesto de gradientes sumamente variadas. Los cuentos se van compactando el uno sobre el otro a través de retazos, gestos, voces y atributos que se van acumulando como granos de arena en un tubo de ensayo.

Con el primer cuento, “Primitivo,” el narrador nos invita a un mundo aparentemente familiar: la Nicaragua rural, implacable y empobrecida. El campesino Avelino se despierta y se queda “contemplando la oscuridad de su cuarto humedecida por el sereno.” Luego de leer esta frase que queda levitando en el horizonte trágico del relato escribí “¿Rulfo, Quiroga?” Pero luego de terminar todos los cuentos taché esta marginalia precipitada. Porque la multitud de voces, la atención al estilo, la importancia de las superficies, la mescolanza de coloquialismos, en fin, todos los elementos que delimitan lo que de manera antojadiza he llamado policostumbrismo, me hacen pensar que Blandino ha cocinado algo suculento y novedoso.

En “Don Pedro Pablo,” el narrador nos ofrece las mentiras de un viejo dicharachero e inca-la-perra. El relato tiene una superficie humorística, pero si apartamos la neblina de pura jodedera notamos que queda algo suspenso en el albur indómito de un viejito que probablemente esté empezando a caer en su senectud. Las caballadas de “Don Pedro” revelan la ironía, y por qué no, la perversidad, tristeza y hasta los limites de ese atributo tan irremediablemente nicaragüense: la ocurrencia.

Y es que, sobre todas las cosas, en Historia vertical Blandino nos regala una verdadera danza de frases, gestos y atributos decidores. El pulpero condescendiente que llama a la niña distraída:

“…shht, niña, tomá muchachita… Le dice a su mamita que el Martes es quince, ¿oyó?”

La mujer que llega penqueada al Centro asistencial, y que luego de revelar a la doctora sus moretones defiende a su verdugo:

Me golpea por resentimiento viejo, pero sólo cuando está buenisano, borracho se pone a llorar y me pide disculpas. Cuatro—en un esputo hacia la puerta.”

La mujer herida sale de la escena. Antes, el narrador nos había reportado que “un acceso de tos” acompaña la mujer hasta la puerta. Ahora la mujer moreteada abandona la clínica acarreando sus bronquios inflamados, su íntima flema, su tos que la delata. En otro relato vuelven a hablar los atributos. El Dr. Joao Cardozo le contesta a su alumna “junto con su calvicie.” Hablan más nuestros cuerpos que nosotros. En Historia vertical son los cuerpos y los atributos los que hablan—gritan, gimen, lloran—hasta por los codos.

Javier Padilla (Honduras-Nicaragua, 1987) es candidato doctoral en el Departamento de Inglés de la Universidad de Princeton. Además de estudiar estrategias de lectura y dibujar malas caricaturas, se dedica a la bloguería y al estudio transnacional de movimientos literarios de vanguardia en el siglo XX.

Anuncio publicitario

Un comentario sobre “Javier reseña a Javier González Blandino (Nicaragua)

  1. FUERTE COMO EL VIENTO, ASI HA SIDO CON SU PROFESION Y SU POESIA, QUE NACE DE LO MAS PROFUNDO DE SU ALMA

    Por Alberto Cuadra M

    Miami 07-06-2012
    Siempre ha caminado con pasos seguros, fuerte como el viento en su profesión del periodismo, ejerciéndolo como un sacerdocio y como un escudo para la defensa del bien común.

    Se trata del poeta y periodista, Antonio Luna Centeno quien vive el día de una manera intensa, como él mismo lo confiesa. El, en su largo caminar, golpéa a la vida para no padecer de una fría y larga melancolía.

    En su recorrido no existe el pasado, sólo se enfoca en el presente, todo lo ve normal y siempre ha dicho que el cambio es necesario en la vida del hombre .

    Su mayor esfuerzo es alcanzar una elevada espiritualidad para curar la enfermedad del alma y sobretodo las cosas, es amigo en grande de la justicia.

    En cualquier lugar donde se encuentre ejerce con acierto el periodismo y nunca ha tenido temor en escribir la verdad y enfrentarse con quienes hacen del aire suave de la vida, una tormenta en contra de los demás. Como dicen va directo al grano practicando al tiempo la moral y la conciencia de lo que hace, para no caer en error.

    Luna Centeno, político en una época, periodista y poeta todo el tiempo así como viajero incansable. En una breve biografía publicada en la Agencia Noticiosa Cultural en Abril del 2006 #115-116,dice: nació en Managua Nicaragua un 20 de Julio de 1950. Se graduó de Licenciado en periodismo en 1974 con opción de periodismo escrito en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN).

    Hizo un post-grado de periodismo para el desarrollo en Roma Italia, y se encuentra exiliado en USA, desde Septiembre de 1985, ha vivido en Francia,Italia, Alemania,Miami,New-Jersey, actualmente reside en Tampa Florida. Ha publicado en diferentes revistas, periódicos, y medios electrónicos. Su poesía dispersa es como dijo el que escribe”La suma de visiones realistas de un mundo alucinante”.

    Hablar de Antonio Luna , es hablar del poeta de fuertes motivaciones sociales que marca la vida con la vida misma, proyectando su poesía en el laberinto de la intrioridad social que lo envuelve y lo cobija.

    Luna Centeno es el poeta y periodista que ve también con el ojo del dolor, priorizando en el vacío que existe en la niñez. En uno de sus poemas titulado”LOS NIÑOS DEL SIGLO XX1 ”, niños que han sido abandonados por una sociedad corrupta y que muestra la miseria del Ser por sus atropellos inhumanos que hace horrible la vida cobijada por la pobreza. El poeta y periodista mencionado, es en fin, un poeta de mucha sensibilidad humana.
    A continuación algunos de sus poemas…
    LOS NIÑOS DEL SIGLO XXI
    Los niños de las calles. Esos inocentes, solos,
    preocupados, harapientos
    descalzos.
    Venden: agua, dulces, periódicos
    jocotes, chiclets, lapices y tantas otras
    baratijas
    Los niños de las calles. Esos maltratados
    Arriesgando sus
    vidas:
    piden centavos, limpian carros, llevan mensajes,
    hacen
    compras, botan basura.
    Los niños: en grupos, solos, hembras, machos,
    blancos, morenos, todos flaquitos.
    Esos niños de las calles. Esos miles de
    niños, comen?
    Desnutridos, famélicos,
    comen desperdicios de restaurantes,
    sobras en las comiderías,
    agua con leche,
    pan duro
    y a veces un pedazo de carne.
    Esos niños de las calles , sin padres?
    son abusados, seducidos, maltratados, repudiados,
    humillados.
    Ellos para vivir , para matar el hambre,
    fuman, beben,
    huelen pega
    Esos niños de las calles, son el futuro?
    Ellos, esos inocentes. Van a la escuela?
    Los niños abandonados, los vagabundos, los
    solitarios
    tienen alma
    tienen anhelos,
    ríen, lloran, aman.
    Los niños de las calles y Cristo y La madre Teresa
    Pasan. Viven.mueren
    Los niños de las calles
    Y Nicaragua.

    North Plainfield, New Jersey, Octubre 1997

    MY MEJOR AMIGA

    Hoy maté al hambre a pura imágenes!
    La maté con trazos y colores,
    con reflejos de rostros, paisajes, animales,
    hombres y mujeres.

    Hoy maté al hambre devorando tinta.
    Me harté de papel.
    Historia, novelas, revistas
    y tanta basura mental.

    Hoy maté al hambre con nombre de libertad.
    A ella la engañé con luces, con gritos.
    El hambre y la soledad juntas siempre,
    gemelas de desesperación eterna.

    Anoche la engañé a ella con sueños;
    Yo viéndome libre,
    estúpido , obeso, con una y otra,
    bellas, desnudas.

    Anoche solo una quarter y cinco pennis,
    Hoy seguí igual.

    Por eso la maté antes que me mate!
    Mañana volveré a matarla, con furia, con odio,
    Y con mi mejor aliada: La poesía.

    North Plainfield New Jersey julio de 1998

    SOLOTURRON@HOTMAIL.COM

    Unos minutos para recordarte que te recuerdo
    Que recuerdo todos los recuerdos. Que forman
    tus recuerdos que son y serán en segundo, minutos,
    horas, días, semanas, quizás sólo recuerdos,
    en la jungla de los recuerdos.

    Me pregunto que recuerdo es el que me hace
    recordarte siempre , de día, de tarde y más por la noche.
    Te recuerdo mucho, muchachita loca!

    Antonio Luna Centeno.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s